¿Por qué es tan importante reconocer los primeros signos de la artrosis?

Siendo capaz de detectar la artrosis a tiempo, estarás ofreciendo a tu veterinario más probabilidades de éxito en el tratamiento de tu perro, para que pueda llevar una vida activa y saludable. Reconocer los primeros signos de artrosis resulta de ayuda tanto para tu mascota como para tu veterinario. Veamos cómo.

Por qué es beneficiosa la detección temprana de artrosis en perros

Cuanto antes identifiques la artrosis, antes podrá recibir tratamiento tu perro. Estos son algunos de los principales beneficios de la detección temprana:

• Alivio del dolor y el malestar.

Si a tu perro le diagnostican artrosis, puede tratarse con diferentes tratamientos y terapias que ayuden a controlar el dolor y el malestar.

• Prevención de daños articulares graves.

Dado que la artrosis es una enfermedad degenerativa que empeora con el tiempo, su detección y tratamiento a tiempo contribuyen a retrasar el avance de la enfermedad.

• Mayor movilidad y bienestar general.

Los perros que se diagnostican y tratan a tiempo suelen conservar una mayor movilidad y disfrutan de una mejor calidad de vida.

De qué modo puede ayudar a tu veterinario una detección precoz

Una estrecha colaboración con tu veterinario es la mejor manera de garantizar que tu perro reciba la atención que necesita para vivir una vida larga y saludable. Te explicamos por qué detectar los signos de artrosis desde el principio puede resultar de ayuda para tu veterinario:

• Un diagnóstico eficiente y preciso.

Los signos de la artrosis a menudo son bastante sutiles, así que no des por supuesto que el veterinario podrá detectarlos durante una visita de rutina. Observa las posibles señales de alerta y acude a tu veterinario si crees que algo va mal. Esto le ayudará a diagnosticar a tu perro de la forma más rápida y sencilla posible.

• Planes de tratamiento personalizados basados en observaciones tempranas.

Cuanto antes se detecten los signos de artrosis, mejor podrá adaptar tu veterinario el plan de tratamiento a tu perro. Es decir, que los medicamentos o terapias que le prescriba se ajustarán mejor a sus necesidades.

• Mejores resultados a largo plazo para el perro.

Si se detecta y trata la artrosis canina a tiempo, se puede mejorar enormemente el pronóstico a largo plazo de tu mascota. Es decir, que tu perro tendrá más posibilidades de seguir llevando una vida activa y sin tener dolores el máximo de tiempo posible.

Señales de alerta de artrosis en perros

Ahora que hemos analizado por qué es tan importante la detección precoz, pasemos a ver algunos de los factores de riesgo y signos de esta enfermedad debilitante.

Factores de riesgo

Incluso antes de que tu perro manifieste posibles signos de artrosis, existen algunas pistas de que podría ser susceptible a esta enfermedad. Comprenderlas puede ayudar a los tutores y a los veterinarios a estar más atentos a la hora de hacer un seguimiento del estado de salud de sus mascotas:

• Raza.

Las razas grandes generalmente tienen un mayor riesgo de sufrir artrosis canina. Los labradores, golden retrievers, rottweilers, pastores alemanes y collies son los más propensos a desarrollarla.

• Edad.

A medida que los perros envejecen, es natural que sus articulaciones se vayan desgastando, por lo que es más posible que desarrollen artrosis. Las lesiones y enfermedades que afectan al desarrollo de las articulaciones, como la osteocondritis disecante o la displasia de codo, también predisponen a la articulación afectada a sufrir artrosis.

• Peso.

Los perros pesados, especialmente los que presentan sobrepeso, tienen un mayor riesgo de sufrir artrosis. Es más, el sobrepeso puede acelerar el avance de la enfermedad. Se cree que esto se debe, al menos en parte, a la influencia de ciertas hormonas en el cartílago de la articulación.

Primeros signos de artrosis a los que debes prestar atención:

Los perros con artrosis pueden presentar una gran variedad de signos físicos y de comportamiento, algunos de los cuales pueden ser bastante sutiles. Por eso es tan importante que vigiles de cerca a tu perro y que acudas al veterinario si observas cualquier problema. Estos son algunos de los signos de artrosis más comunes a los que debes prestar atención:

• Rigidez y cambios en los andares.

Los movimientos rígidos pueden ser un signo de artrosis, sobre todo al ponerse de pie, al echarse o al subir escaleras. También puede que observes cambios en la forma de caminar y en la postura de tu perro, lo que puede deberse a un dolor crónico.

• Aumento de peso y pérdida de músculo.

La falta de ejercicio en perros con artrosis puede provocar aumento de peso y pérdida muscular, lo que a su vez contribuye a una disminución de la movilidad.

• Exceso de lametones o mordisqueos en una articulación en particular.

Algunos perros con artrosis pueden empezar a lamerse, mordisquear o cuidarse excesivamente una articulación en particular como un modo de buscar alivio del dolor y el malestar.

• Agresividad o cambios de temperamento.

Los perros con dolor crónico pueden volverse más defensivos o agresivos debido a su malestar. Esto puede manifestarse incluso en mascotas que antes eran tranquilas.

• Reticencia a hacer ejercicio o a jugar.

Es posible que los perros con artrosis tengan menos ganas de jugar o hacer ejercicio debido al dolor. También pueden resistirse a saltar a la cama o al interior del coche, negarse a subir escaleras y, en general, parecer cansados y letárgicos.

Tratamiento para la artrosis canina

Aunque la artrosis no tiene cura, a menudo sí puede tratarse y controlarse de manera eficaz. Y cuanto antes se reconozcan los signos, antes se podrá hacer un diagnóstico e iniciar el tratamiento.

Entre algunos de los tratamientos más habituales para la artrosis canina están los anticuerpos monoclonales, los suplementos para las articulaciones y la fisioterapia. Tu veterinario también puede recomendarte modificar la rutina de ejercicio de tu perro, cambiar su dieta y adaptar el entorno en casa.

Lo más importante es recordar que la detección y el tratamiento de la enfermedad a tiempo pueden mejorar en gran medida el pronóstico a largo plazo y la calidad de vida general de tu perro. Por lo tanto, presta atención a los signos de artrosis, visita a tu veterinario si algo te preocupa y trabajad juntos para aseguraros de que tu compañero canino reciba la atención que necesita.